Aretes de plumas de diversos colores y tamaños, con apliques en palma de iraca y semillas. Son hechos en Puerto Leguízamo en el bajo Putumayo por mujeres indígenas que viven junto al río. Este municipio, por su condición amazónica, cuenta con una gran diversidad de aves, por lo que las mujeres aprovechan las plumas que caen del cielo para realizar artesanías como separadores de libros, accesorios para el pelo, cuadros pequeños, aretes y abanicos. Al comprar estos productos ayudas a la independencia económica de las mujeres que los hacen.